Algunos de ustedes sabrán que trabajo en un pequeño observatorio dedicado a la divulgación de la astronomía en el campus de la Universidad de La Punta. El telescopio está dentro del terreno del parque astronómico que tenemos y a veces me toca colaborar con el parque mismo; en este caso estamos armando una exposición de museo a la que (por ahora) llamamos “Semana de la exploración espacial”, que vamos a abrir al público al mismo tiempo que hacemos el lanzamiento de la cápsula estratosférica Clementina III desde el parque. Va a ser una linda semana. Por mi lado, en lo que estoy ayudando es en parte proveer diseños para maquetas de algunas sondas y algo de texto para los posters que las acompañen, por lo que estuve leyendo un poco acerca de todo lo que pasó entre el primer Sputnik y la ISS. Y por supuesto, las Voyager; las mas reputamadrescamente fabulantásticas sondas que la humanidad haya revoleado fuera del sistema solar hasta ahora (lo que no es poco decir, dada la competencia). Este post es una breve historia de cómo la estupidez corporativa se puede colar hasta en las cosas mas lindas que somos capaces de hacer como especie.
Las Voyager. La 1 y la 2, Son máquinas asombrosas. Las imágenes que la 2 mandó de Júpiter son prácticamente el primer recuerdo que tengo, ese planeta enorme con su gran mancha roja en primer plano:
El salto en conocimiento astronómico que dimos con esas sondas creo que sólo fue superado después por el Hubble (y bueh, no hay con qué darle al Hubble). Por supuesto que todos los involucrados en esos proyectos sabían que estaban haciendo algo grandioso, y eso se nota en la dedicación que han puesto en unos aparatos que, después de todo, aún siguen funcionando. Tal vez es por esto que estaban tan optimistas; en ambas Voyager incluyeron discos de oro; un mensaje dirigido a los extraterrestres si es que se diera la casualidad de que alguno se cruce en el camino de estos viajeros. Claro que la posibilidad de que sean encontradas por enanos verdes cabezones (o equivalente realista, cualquiera sea la forma que tengan) es extremadamente baja por lo inmenso del espacio.
Eran optimistas.
Entre esos optimistas se encontraban dos relativamente conocidos: Carlos Sagan y Francisco Drake (si, el de la ecuación de Drake). Algo había que poner en esta botella cósmica lanzada al vacío, y a ellos (y colaboradores) les tocó la tarea de elegir qué iba a ir en el mensaje. Tenía que ser algo que representara a toda la humanidad y tenía que entrar todo en algo muy parecido a los discos de vinilo que los mas viejos lectores recordarán (para los que no, es algo así como un mp3 pero con forma de plato grande y surcos). Pues bien, la verdad es que hicieron una linda selección y trataron de que fuera lo mas representativa posible. Los discos contenían:
-116 imágenes y sonidos naturales, como el viento, truenos, canto de pájaros, etc.
-Selección de canciones de todo el mundo.
-Saludos en 55 idiomas.
Las canciones incluían desde Beethoven y Stravinsky hasta Chuck Berry y Kesarbai Kerkar. No sólo hay que ser grosso para estar en el disco, hay que ser Beethoven-level grosso. Por eso, cuando Carl Sagan les preguntó a los Beatles si querían que se incluyera su canción “Here comes the sun” en el disco, estuvieron encantados (la canción es muy linda, no sé si como para estar en un disco de oro interestelar pero por lo menos zafa) ¿Qué mas podían querer? Su canción estaría flotando en el espacio tal vez mucho después de que dejemos de existir como especie, e incluso pueda llegar a ser interceptada por algún extraterrestre y darle la oportunidad de sacudir el o los apéndices que contengan a su sistema nervioso central al ritmo de las variaciones de presión del aire entre los 20 y 22.000 Hz… Esa clase de viajes cósmicos eran hasta entonces accesibles para los cuatro de Liverpool sólo via ácido. ¿Quién diría que no?
EMI.
EMI dijo que no.
Es en serio. La canción “Here comes the sun”, compuesta por George Harrison fue grabada si mal no recuerdo en los estudios Apple y distribuida por EMI. Al parecer a la discográfica le preocupaba que algún rigeliano inescrupuloso escuchara la canción sin pagar, por lo que no cedió los derechos para la especial ocasión y los discos de las Voyager tuvieron que salir sin ese tema. Estos son los escenarios que se me ocurre les debe haber pasado por la cabeza a los ejecutivos de EMI como para desaprovechar semejante oportunidad de marketing:
-Que los extraterrestres intercepten el disco y lo escuchen gratis.
-Que lo distribuyan entre otros miembros de su especie que también puedan llegar a escucharlo (o detectarlo con sus organos sensoriales) sin haber conseguido sus propias copias legales.
-Que ellos empiecen a mandar sondas con obras artísticas sonoras grabadas esperando que desde la tierra se les envíe mas, generando un intercambio tipo P2P (Planet to Planet) que terminaría por acabar con la sufrida industria discográfica como pasaría después por culpa de la radio, el cassette, el CD regrabable, el mp3, Napster, Emule, TPB, Colibritany usando música sin licencia de fondo en un video de Youtube.
¿Se imaginan un universo así? ¿Qué clase de deidad negaría a los artistas el sagrado 5% (con suerte) que les dejan las discográficas? ¡Qué horror!. Y así, las Voyager I y II salieron cargadas de esperanza, antenas, instrumentos, cámaras y un disco con un montón de lo que en una ventana de mas o menos 300 años la humanidad llamaría “buena música”, pero sin los Beatles. No sea cosa que la nave sea interceptada y abordada por algún plato volador pirata, y así la preciada canción caiga en los apéndices (uno de ellos de palo) de un extraño y viscoso ser con parches en el 50% de sus órganos sensibles a la luz y sin ningún respeto por la propiedad intelectual de los demás.
Es así como el mensaje mas lindo y cuidado que ha salido del sistema solar de parte de nuestra especie ha sido afectado por los miedos y la codicia de una corporación. Eso sí, nadie puede decir que no hacen esfuerzos de escala astronómica en nombre de “salvaguardar los derechos de sus artistas”.
Si quieren un lindo paseo por el contenido de los discos de oro, lo van a encontrar acá. Si hacen click en el lugar correcto, tendrán acceso a las grabaciones del disco. 100% libre de Beatles.
“generando un intercambio tipo P2P (Planet to Planet)” El mejor pasaje que leí en tiempo! Muy buena data che, ni la más puta idea que no los habían dejado. Mi viejo siempre me habló de los Beatles desde que era chico y para darme una idea de lo grande que eran me decía que estaban hasta en una “nave” en el espacio.
Oh the humanity….
vean pues al parecer el absurdo es evidente! si beethoven hubiera tenido patrocinio por una compañía como la EMI también lo hubieran sacado.
Pobres herederos y gente que compró los derechos de las canciones de Beethoven… no pueden cobrar sin trabajar!
Chimango te fuiste a la mierda! es por lejos el mejor post que leí en mi vida, y eso que paso más horas al día leyendo que durmiendo, y duermo mucho. Excelente, genial, supremo… Realmente sos un animal posteando (en el buen sentido). Seguí así!
Gracias por compartirlo! Apenas consiga una copia del libro de Sagan y Drake donde cuentan todo lo referente al disco pongo algo extra respecto a cual podría ser la verdadera razón por la que EMI no quiso que la canción fuese incluída, la verdad es inentendible lo que hicieron.
Es alguno de estos? (todavía los tengo pendientes)
http://epubgratis.me/taxonomy/term/300
No, es un poco mas “oscuro”; encontré referencias sólo en el ADS de la NASA y no sé si lo mencionan en el link de la wikipedia. Es este:
Bueno, en mercadolibre lo venden http://listado.mercadolibre.com.ar/murmullos-de-la-tierra-carl-sagan-editorial-planeta
Estuve buscando el epub o pdf y viene complicado parece… ni en castellano ni en inglés. Hay un post en Taringa que no puedo ver (bloqueado por proxy), en casa me fijo.
Ahora me dejaste intrigado😛
Me parece que el mes que viene lo compro. Gracias por el link!
Apurate porque ya hay uno menos a la venta😛 . Muy interesante por cierto, de los Beatles solamente dice que el tema legal era demasiado “oscuro” y entre que la NASA es tremendamente rompebolas con el tema de derechos (para no herir suseptibilidades) y que tenían muy poco tiempo, terminó quedando de lado. Aunque se supone que hay todo un capítulo de Ferris hablando sobre la música, al que todavía no llegué, posiblemente ahi aclaren un poco mas el tema.
Reblogged this on Boludeces y otras yerbas… and commented:
Saludos al que pueda seguir cayendo por error en este espacio abandonado hace tiempo! hace meses que no escribo, y para satisfacer sus ganas de leer algo muy bueno les dejo este excelente post de Chimango en su blog Animal de ruta, demasiado bueno a mi parecer para no compartirlo. Hasta pronto!
Tampoco conocía la anécdota. Buen post!
Para el que se interese más en la historia de las sondas, acá una entrada muy completa de Daniel Marín
http://danielmarin.blogspot.com.ar/2012/09/la-historia-de-las-voyager-los.html
Cuando termine de armar la exposición que vamos a hacer en el parque astronómico tal vez suba algo del material que conseguí (que incluye curiosidades como esta y muchas otras). Igual guardo ese link de ese excelente blog para mas adelante, gracias!
Increíble lo de EMI (Estúpidos, Marmotas, Imbéciles). Y magistral lo de P2P.