Este es un post invitado, quizás salga un poco de la temática (?) del blog, espero que no. De todas formas gracias al Guillote y al Chimango por la oportunidad.
El motivo de este post es bien sencillo: recomendar un libro. Se llama Sustainable Energy – without the hot air, o algo así como Energía Sustentable sin boludeces. Fue escrito por David JC MacKay, un doctor en física inglés que tuvo la excelente idea de ponerse a hacer cálculos que sean sencillos, útiles y relevantes para enriquecer el debate sobre la energía en el Reino Unido, y diria que en el mundo. Las decisiones sobre la energía y sus fuentes deberían tomarse basándose en hechos y datos y no en emociones. Lamentablemente, en español solo hay un resumen (10 páginas contra 383 del original); en inglés pueden encontrar el libro en este link (inglés) y el resumen en español aquí.
El libro tiene muchas cosas interesantes, la primera es que es gratuito en su formato online. “I didn’t write this book to make money. I wrote it because sustainable energy is important”, en sus palabras. Lo segundo es que continuamente el autor complementa el libro con su blog, la tercera y quizás más interesante, es que el libro fue publicado bajo una licencia que permite a cualquiera usar el material que hay en él (sin contar con las imágenes que provienen de terceros). Esto, claro está, haciendo el reconocimiento debido al autor.
MacKay parte de dos premisas simples:
a) El calentamiento global y el cambio climático actual es causado por los seres humanos.
b) Las fuentes de energía fósiles (petróleo, gas, carbón) son finitas.
Sobre la primera premisa, puedo decir que el IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Chage) recién liberó su reporte donde se puede leer “La influencia humana en el clima es clara”. Esto es evidente a partir del incremento en la concentración de gases de efecto invernadero (producto de entre otras cosas, la combustión de derivados de petróleo, gas y carbón):
Human influence on the climate system is clear. This is evident from the increasing greenhouse gas concentrations in the atmosphere, positive radiative forcing, observed warming, and understanding of the climate system. (link)
Sobre la segunda premisa, la de lo finito de los hidrocarburos, no agregaré nada por el momento, pero los post del Guillote (Sistemas Petroleros y Shale Gas) tienen información al respecto.
Ambas premisas de McKay tienen como conclusión algo obvio: es necesario que salgamos cuanto antes de los combustibles fósiles como fuente principal de energía. Incluso si no creen que el cambio climatico se debe a la actividad humana, la segunda premisa apunta a lo mismo. Es decir, las fuentes de hidrocarburos son finitas y mucha de la energía que usamos para la industria, el transporte, el sistema alimenticio, etcétera, se extrae por combustión de esos hidrocarburos. Por ello es fundamental conseguir otras fuentes de energía con las que sustituyamos las decrecientes basadas en petróleo, gas y carbón.
A partir de allí, MacKay se lanza por un lado a contabilizar las fuentes de energía sustentables por un lado y por otro las actividades y cosas en las que se gasta energía (transporte, calefacción, manufactura, etc). Esas cantidades las calcula/estima por persona para el Reino Unido. Las coloca en dos pilas, algo así como el debe y el haber en contabilidad básica pero en energía. Para las fuentes usó un color verde y para los gastos de energía usó un color rojo.
La idea es simple: si la pila de la energía sustentable (verde) es mayor que la pila de la energía gastada actualmente (rojo), entonces es factible sustituir los combustibles fósiles por las fuentes renovables. Esta cuenta la hizo per capita, estimando consumos promedio de una persona en Reino Unido.
La clase de análisis que hace se parece un poco a lo siguiente. Si en Argentina el consumo per capita de energía es de 100 unidades y esas 100 unidades de energía en la actualidad las proveen en su mayoría fuentes no renovables de energía :
- ¿Podemos sustituir una parte de esas 100 unidades por fuentes renovables? ¿Y sustituir todo?
- ¿Si llenamos toda la Argentina con molinos de viento, ¿podemos llegar a la mitad de esas unidades de energía necesarias? ¿Al 10% o al 90% de esas 100 unidades de energía consumida?
- Obviamente es un delirio llenar el 100% del territorio nacional de generadores eólicos, pero si se llena el 10% de la superficie de la provincia de Chubut con aerogeneradores, cuánto de esas 100 unidades de energía que consumimos día a día se podría suplir?
- ¿Es un delirio llenar el 10 % de una provincia? ¿Hay materiales suficientes para hacer esos molinos de viento por ejemplo?
- Si cubrimos el 1 % del territorio nacional con celdas fotovoltaicas ¿cuánto de las 100 unidades nos ayudaría a cubrir?
Es precisamente este tipo de análisis, usando números razonables (no en vano el primer capítulo se llama Numbers, not adjectives o “Números y no adjetivos”), el que debería guiar las discusiones sobre las energías renovables, acá y en todas partes. Creo que si estamos informados, hacemos las cuentas nosotros mismos, sabremos si en el debate público sobre la energía nos están metiendo gato por liebre. El debate debe existir y debemos estar informados. Este libro es un excelente punto de partida. La idea, en el futuro próximo, es ir desmenuzando lo que McKay escribe y tratar de hacer las cuentas aplicadas a la Argentina.
Aqui un video de la archiconocida TED hecho por David J C MacKay, para que tengan una idea del contenido y tono del libro (tiene subtitulos en español).